Rodrigo Rojo: “Así gané la clasificación individual del Across Andes, 1.430 km de emociones”#AcrossAndes #RidechileRaceReport

Race Report Across Andes 2019

DIA 1. La ventaja definitiva

A las 6 de la mañana del sábado 30 de noviembre se dio la partida neutralizada en Chamisero. La cuesta de Chacabuco mostró quien es quien, Andrés Tagle y Rodrigo Errazuriz pasaron en los primeros lugares, yo en tercero, seguido por el suizo Fabián Burri (segundo lugar en Bikingman Taiwan) y los brasileros Williams Nascimento y Marcelo Soares “Mixirica”. Ya en Auco quedé solo y hasta el último día nunca más vi a otro corredor. Tras pasar las durísimas cuestas antes y después de Alicahue llegué al PC1 de Petorca (km 209) a las 17.00 hs, y rápidamente seguí según mi planificación: Suponiendo que la mayoría se detendría en este punto, seguí de largo otros 75 km de cuestas, hasta llegar a las 21.30 a Caimanes, al hotel-restaurante que meses antes había conocido.

Foto: Cristián Muñoz, Rodrigo Rojo y Wilson Nascimento

DIA 2. ¿Y a qué hora partieron?

Sin señal de internet ni teléfono, partí a buen ritmo a las 5.30 AM, para hacer la bajada del túnel las Astas con luz natural. Tras una breve parada en Illapel me entero que el chileno Cristian Muñoz y la norteamericana Ashley Carelock, ya estaban llegando a esa ciudad, y que habrían partido de Petorca a la 1 de la madrugada. Seguí rápidamente y fui recuperando la diferencia. Tras una breve detención en el PC2 de Combarbalá (km 418), seguí bajo el calor y viento en contra a Ovalle.  A la salida de Punitaqui tuve la primera y única pinchadura, que me retrasó unos 15 minutos de mi itinerario. Tratando de recuperar ese tiempo, cometí el error de pasar de largo en Ovalle sin reabastecerme. El camino por la ruta Antakari presentaba numerosos caseríos, pero por ser domingo en la tarde, los almacenes estaban cerrados, obligándome a dosificar lo poco que llevaba. A duras penas logré llegar a Serón a las 10 de la noche, sin señal.

DIA 3. ¿Por dónde llego a Andacollo?

Partí a las 5.30 y en una hora ya estaba desayunando en Hurtado. Ahí vi que Ashley y Cristián estaban a poco más de dos horas. Al llegar al CP3 en Vicuña (km 627) mi ventaja había aumentado, y partí rápidamente a Andacollo. Ahí vino el desastre, falló el sensor del GPS y me mandó a “pasear” a cualquier parte. Retomé el camino, pero muy inseguro, haciendo parar vehículos para que me dieran indicaciones de cómo llegar. Con muchos problemas logré llegar a Andacollo recién poco después de las 19.00.  Apenas una bebida y rápidamente a seguir bajando. El agotamiento y tiempo perdido me impidió llegar a Ovalle, por lo que alojé en Samo Alto. Antes de dormir, ya se podía ver que habían partido Vicuña Cristian, Juan Manuel Venturino, Sebastián Lucero, Ashley, Williams y Mixirica.

Foto: Juan Manuel y Cristian persiguiéndome rumbo a Cabildo

Dia 4. No me vas a pillar

Era apenas las 5 de la mañana y ya Venturino y Lucero venían a 10 km. Partí rápidamente, pasé de largo por Ovalle, y a la altura de Sotaqui, la diferencia con Venturino era de 30 km. Ahí tuvimos un duelo de contrarreloj individual de más de 100 km, y logré llegar al PC4 en Combarbalá (km 871) con menos de 20 km de ventaja. Bajo un calor infernal y viento en contra continué la ruta, entendiendo que el resto iba a descansar la tarde en el PC4. Con mucho retraso logré llegar a Canela Baja y continué rumbo a Limahuida. Me pilló la noche y el cansancio, y a las 11 de la noche, a unos 6 km antes de esa localidad, conseguí alojamiento en una casa particular.

DIA 5. Por favor déjenme descansar!

Cristián y Juan Manuel durmieron unas horas y pedalearon la tarde y toda la noche, y a las 5 AM ya el chileno había logrado pasarme por 6 km, con Venturino apenas a 5 km atrás. Salí rápidamente a pillarlo, y vi que se detuvo en Caimanes  a desayunar. Si bien pretendía hacer lo mismo, pasé de largo para recuperar el liderato, más que nada como un efecto psicológico. La ventaja nuevamente fue aumentando, cruce a la hora de más calor los 21 km de la cuesta el Tártaro, y al llegar a Putaendo vi que ambos seguían en Cabildo. Llegué agotado a Los Andes, y cuando buscaba alojamiento me di cuenta que ya habían salido de Cabildo, por lo que probablemente me alcanzarían durante la madrugada. Decidí que si me alcanzaban, sería pedaleando y no durmiendo, por lo que seguí hacia Portillo, llegando a Guardia Vieja poco después de las 11 de la noche.

Foto: Subiendo la Cuesta Chacabuco

DIA 6. La definición que no pudo ser

Esperaba dormir y cenar en la hostería, pero estaba cerrada. Tuve que dormir a la intemperie abrigándome con lo que tenía a mano, y sólo como única fuente de calorías un sobre de jugo en polvo. A las 4 AM ya estaba pedaleando, cansado, con sueño y hambre, pero manteniendo un ritmo digno y parejo. En la oscuridad me parecía ver las luces de mis rivales acercándose. Ya en los caracoles  me dieron la peor de las noticias: mi amigo Juan Manuel Venturino había sido atropellado a la salida de Putaendo. Con varias horas de diferencia con Cristián el triunfo era virtualmente seguro, pero por respeto a Juanma, seguí forzando el ritmo, logrando llegar de vuelta a Santiago a las 18.00 hr, tras 5 días y medio de pedaleo, aventuras y emociones.  A un mes de cumplir 53 años, no es fácil hacerlo.

Rodrigo Rojo

Fecha de la carrera: Sábado 30 de noviembre al Domingo 8 de diciembre de 2019

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